Estados Unidos ha sido visto, desde tiempos remotos, como un país poderoso que suele tener una sociedad feliz, civilizada, que no sufre de problemas internos y muestra sus avances en varios aspectos de la vida cotidiana, pero no todo es felicidad en la unión americana, debido a que enfrenta problemas importantes, uno de los más graves: las matanzas.
Ya sea por terrorismo, por órdenes «espirituales», o simplemente porque el agresor padece de sus facultades mentales, existen sucesos que han dejado huella en la historia de este país, a tal grado de ser muy recurrentes, algo que no debería suceder en un mundo colmado de guerras y enfrentamientos.
¿Quieres conocer las matanzas que más se recuerdan en los Estados Unidos? Aquí las presentamos, en nuestro Top 5:
1. Killeen, Texas (1991)
Conocida como «La matanza de Luby’s», ésta se suscitó un 16 de octubre en una cafetería de la localidad, cuando George Hennard, de 35 años, impactó su camioneta contra la puerta del establecimiento, para después, amenazar de palabra y abrir fuego contra los presentes.
El abarrotado restaurante presenció la muerte de 23 personas e hirió a otros 20, al lugar llegaron policías a confrontarlo y herirlo, al verse acorralado, como suele suceder en este tipo de casos, el atacante se quita la vida con la propia arma que usó para delinquir. Cabe destacar que George ya había sido detenido anteriormente por posesión de marihuana y, según los testigos, atacaba principalmente a las mujeres.
2. Newton, Connecticut (2012)
El 14 de diciembre de ese año, se llevó a cabo uno de los tiroteos más mortíferos dentro de un centro escolar, propiciado por Adam Lanza, un joven de 20 años que ingresó a la Escuela Primaria de Sandy Hook para matar a los estudiantes, así como a profesores y a su propia madre, quien era voluntaria.
El saldo final fue de 27 fallecidos, de los cuales 20 eran niños, siete adultos y el propio Adam Lanza, que se quitó la vida; descargó un total de 154 balas. Tras los sucesos, las investigaciones arrojaron que el asesino sentía que su madre amaba más a los niños de Sandy Hook que a él, y varios testigos marcaban el odio de Adam al centro de estudios, por lo que podría ser un motivo para llevar a cabo su terrorífico plan.
3. Virginia Tech (2007)
El 16 de abril de ese año, la Universidad Politécnica de Virginia vivió momentos de terror, al ser el escenario de un tiroteo protagonizado por Seung-Hui Cho, un joven surcoreano de 23 años, estudiante de letras inglesas y residente de esta institución
Seung-Hui llego a las nueve de la mañana, hora local, a uno de los salones del edificio Norris Hill, dentro del campus, para disparar a todos los presentes y terminar el acto con su suicidio, dos horas antes había matado a dos personas en la zona de dormitorios, el saldo final fue de 32 muertos y 17 heridos. Durante el lapso de los dos ataques, el autor de la masacre había enviado un paquete por correo a la cadena de televisión NBC, con archivos, fotos y videos de su malévolo plan.
4. Orlando, Florida (2016)
La madrugada del 12 de junio, un hombre identificado por las autoridades como Omar Siddique Mateen, entró a Pulse, una discoteca gay de la localidad, para realizar disparos contra los asistentes, al ser localizado por las autoridades, el sujeto se atrincheró en el establecimiento, tomando como rehenes a los que permanecían vivos.
Tres horas después, el equipo de élite SWAT entró al bar para abatir al delincuente, quien opuso resistencia mediante un intercambio de balas. El recuento de los daños fue calculado en 50 muertes y 53 heridos, se desconoce si algunos de los fallecidos eran parte de los rehenes; el grupo terrorista Estado Islámico se adjudicó el ataque, quien calificó a Mateen como su «combatiente».
5. Las Vegas, Nevada (2017)
Este es, hasta la fecha en la que fue publicado este texto, el tiroteo más mortífero en la historia de los Estados Unidos, y se suscitó en uno de los lugares más concurridos de la también llamada «ciudad del pecado», su saldo final fue de 58 personas fallecidas y más de 500 resultaron con heridas. El responsable de esta barbarie se llama Stephen Paddock.
La noche del primero de octubre, Paddock subió a una habitación del piso 32 del hotel Mandalay Bay, para ahuyentar a 22 mil asistentes de un festival de música country, celebrado a las afueras del inmueble, contra los que abrió fuego, descargando más de mil balas durante diez minutos aproximadamente. Cuando fue encontrado, el autor de la masacre se había suicidado, y en la habitación se encontraron varias armas de largo alcance, así como explosivos. Aún se mantienen varias incógnitas por resolver, puntos clave a confirmar en este caso, incluido el motivo que llevó a Paddock a atentar contra la vida de miles de personas.
Hasta aquí el recuento de las matanzas más recordadas en la historia de los Estados Unidos, por desgracia, éstas se han vuelto más comunes de lo que parece, y trae como consecuencia un intenso debate sobre el uso y venta de armas en el país, ya que, en gran parte del territorio, es fácil ser dueño de estos artefactos. ¿Tú que piensas de estos ataques? Anótalo en la sección de comentarios.